Desde hace unos días las redes sociales están saturadas de publicidad de cátedras de la FADU. Docentes publicitando en foros de alumnxs. Ofertas explícitas y clandestinas, viajes, experiencias de vida, notas "guardadas" para evitar finales. No necesariamente hay en pugna ideología, el campo o borde de las disciplinas, no se debate la orientación mas general de la universidad, sino mas bien son la expresión de cuan profundo ha calado la adaptación a la falta de presupuesto y precarización laboral impuesta por las autoridades.
El ajuste presupuestario que larga y sostenidamente denunciamos desde la Agrupación Naranja -conducción de AGD UBA- empieza a instalar dinámicas, erigir símbolos: las autoridades ajustadoras impusieron en gran parte de la docencia en FADU la necesidad de "captar" alumnxs, básicamente, porque -bajo su política de "puntaje"- las inscripciones se trasforman en puntos y los puntos en salario docente. Las autoridades ajustadoras que bloquean la aplicación del Convenio Colectivo de Trabajo (CCT, ver aquí) trabajan por disociar salario y trabajo docente, desplazándolo del campo de los derechos laborales y política educativa hacia una suerte de emprendorismo, en donde los pobrísimos recursos para pagar salarios dependen del esfuerzo individual de la docencia por captar y retener alumnxs.
Esta “uberización” que buscan instalar exonera a las autoridades nacionales y universitarias sobre el financiamento único y estatal de la universidad, quiebra la consciencia de clase de lxs compañerxs y la unidad del movimiento docente por sus reivindicaciones. El sistema de puntaje que las autoridades de toda laya han sostenido es un dispositivo que diluye la visibilidad de quien lleva adelante el ajuste (ver aquí). Presenta a lxs titulares en el lugar de "patrón" de sus compañerxs docentes precarizadxs con contratos semestrales o anuales, al mismo tiempo que 3 de cada 4 de lxs propixs titulares también son precarizados con contratos semestrales o anuales. Esta división divide y debilita al movimiento docente frente a las políticas de ajuste y habilita ataques como los orquestados sobre las cátedras dirigidas por titulares precarizados como interinxs que no se alinearon con la gestión (Pedemonte, Carnicer).
La consigna de libertad de elección de cátedra de hace 100 años, nada tenía que ver con la uberización, sino todo lo contrario, fue una consigna de lucha contra las camarillas que se transmitían las cátedras por herencia. Hoy, las camarillas que bloquean la democratización de la Universidad y la vigencia del CCT, argumentan "libertad de elección de cátedra" en las inscripciones para atacar los derechos laborales.
Este ataque a la estabilidad laboral FADU no es un hecho aislado. Se da al mismo tiempo que AGD y CONADU Histórica el estado de alerta y movilización en defensa del salario y cláusulas gatillo amenazadas por el gobierno Nacional que, en el marco del acuerdo con el FMI, ya bloqueó la movilidad jubilatoria y pone en la mira regímenes jubilatorios como el conquistado con la lucha por la docencia universitaria. La docencia de media y primaria de 6 provincias no inició las clases en rechazo al bloqueo de la aplicación de cláusulas gatillo por la inflación y el resto del activismo se organiza contra la entrega de las burocracias sindicales que, como Hugo Yasky, quien declara que "las cláusulas gatillo generan una inercia inflacionaria".
Desde la agrupación naranja convocamos a la docencia en FADU a deliberar sobre las distintas modalidades de adaptación a las políticas de ajuste dictadas por el gobierno y el FMI.
Organicémonos por salario acorde a la canasta básica, presupuesto y plena vigencia del CCT para garantizar estabilidad laboral.
Agrupación Naranja en AGD FADU. 05/03/2020
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